Estrenamos sección, «Retroguantes», dedicada a hacer un pequeño homenaje a modelos clásicos que causaron un gran impacto en el mercado del portero. Guantes que pasarán a la historia por su diseño, por sus innovaciones o por simplemente, dar un paso más como la herramienta que todos nosotros usamos.
Ha llegado a mis manos, un ejemplar que me ha costado bastante identificar y poder ubicar de una manera concreta. Se trata de un par de Reusch, un modelo réplica del inigualable World Keeper, mítico donde los haya y que estuvo en las manos de una cantidad de porteros de primer nivel. Nombres como Köpke, Schmeichel, Vitor Baia o aquí en España, Zubizarreta, usaron estos guantes que con una estética tan clásica, eran probablemente los números 1 de la época.
La particularidad de estos guantes es que incorporan el corte negativo, muy novedoso en aquella época, en la que prácticamente la totalidad de los guantes del mercado eran corte flat (plano)
La palma no viene especificada ni en el guante ni en su embalaje original, que es genérico, por lo que podemos deducir que es la Super Soft Grip, la palma más básica de los guantes Reusch. La sensación de los guantes en la mano es de comodidad, mucha comodidad. Son muy ligeros, el dedo pulgar está recubierto de forro lo que hace que sea muy ligero pero a la vez, endeble. El cuerpo del guante es de forro textil, con latex en la base de un grosor importante, y con el logo de la flecha característica en goma, también muy grueso. Los dedos tienen «añadidos» de latex encima del forro.
Una muñequera muy corta, de aprox 6-7 cm, elástica y de doble anclaje. Con la parte exterior echa de textil y hueco personalizable, y por la cara interior, con un añadido de látex que realmente no le veo demasiada utilidad.
En definitiva, unos guantes clásicos pero realmente preciosos a la vista. Lógicamente, la unidad que dispongo actualmente no la he probado en el campo ya que, por el valor que tiene, pienso que bien merecen tenerlos cuidados y sin estrenar como están a día de hoy. Un guante digno de tener en cualquier colección que se precie.